Operación Marea Negra, la serie de cuatro episodios desarrollada por Daniel Calparsoro (Cien años de perdón, Hasta el cielo) para Prime Video y que verá la luz al completo en la plataforma de 'streaming' el próximo viernes 25 de febrero es una historia real. No queda muy lejana, puesto que el suceso que la inspira tuvo lugar hace poco más de dos años en la costa atlántica europea, pero sin duda hace falta recordárselo a uno mismo más de una vez mientras atestiguamos el viaje de tres hombres al servicio del narcotráfico cruzando el océano Atlántico a bordo de un semisumergible de fabricación casera.
La travesía acabó con la interceptación del navegable en la Ría de Aldán, en Pontevedra, y los tres miembros de la tripulación fueron detenidos y puestos a disposición judicial. Entonces transcurría noviembre de 2019 y en la operación, la que bautiza la serie de Prime Video, se incautaron más de 3 kilos de cocaína.
A lo largo de los cuatro episodios que dura la serie, Calparsoro hace una representación tan cuidada como asfixiante de lo pudo ser la travesía a través de los datos que conocemos y con licencias creativas, cambiando algunos detalles de la trama. Y la historia que narra el famoso director español consigue ser tan impactante como la que acaparó centenares de titulares hace dos años y que convirtió en realidad el mito de la existencia del narcotráfico transoceánico a bordo de submarinos como el que vemos en la serie.
"Una de las cosas que más me llamó la atención y que más me atrajo del proyecto es que, por un lado, está la hazaña. La historia de aventuras de estos tipos extraordinarios que hacen algo extraordinario. Y, por otro, la parte de la fechoría, porque están haciendo algo terrible, que es traer 3000 kilos de droga que va a afectar de forma negativa a muchas vidas", reflexiona Álex González en declaraciones a SensaCine sobre esta historia cuyos protagonistas viven una increíble historia de supervivencia, pero que no pueden percibirse como héroes porque no dejan de ser unos criminales. "Pero no me preocupaba a nivel moral", asegura el actor. "Porque está muy bien contado y enmarcado en una historia donde se cuenta que la Guardia Civil, que hace muy bien su trabajo, intervino y lo interceptó, qué fue lo que pasó en la vida real".
El actor, madrileño de nacimiento aunque su trabajado acento gallego para la serie nos pueda llevar a error, es el encargado de interpretar al patrón del navío, un joven gallego, campeón de España de boxeo amateur con escasos recursos e inconforme con su estilo de vida.
"Es tipo que tiene dos motores. Uno es la ambición económica de una vida mejor y de otra posición social; y, por otra parte, la sed de reconocimiento", reflexiona González sobre Nando. "Lo encuentra en mitad del océano Atlántico en el momento que menos se esperaba. Y ahí es donde se da cuenta de que es un hombre talentoso, que lo demuestra haciendo algo terrible, pero que realmente es algo extraordinario y una hazaña, para mí, a la altura de Cristóbal Colón o Magallanes".
"Lo hablamos varias veces con Daniel [Calparsoro] al principio y en algunas entrevistas ya decíamos que es un viaje épico", comenta al respecto David Trejos, el encargado de interpretar al colombiano al servicio más involucrado con la banda de narcos que pone en marcha la operación. "Una hazaña épica que, guardando las proporciones, es un poco Jasón y los argonautas.
"Y también pensábamos en qué contexto ellos toman esta decisión. En el personaje de Walter, su leitmotiv y su impulso inicial, su impulso primario, es proteger a su familia. Y por eso tiene que estar metido ahí", reflexiona el actor colombiano. "Siempre pensábamos que llevó a estos hombres a tomar esa decisión, qué hay detrás de eso: una amenaza a la familia, el dinero, la ambición".
"Nosotros estuvimos tres semanas, ocho horas diarias metidos ahí y no te imaginas lo que fue", recuerda Trejos sobre la experiencia de rodaje. "Fue tremendo fue muy difícil para nosotros físicamente y actoralmente. Además, yo tengo un poco de claustrofobia, no me gustan mucho los espacios cerrados, me ponen un poco nervioso. Así que estar ahí fue todo un reto. Y todos los días pensábamos cómo era en la vida real esa tormenta, el mar, el océano, y en estos hombres encerrados ahí sin tener más que dos latas de atún y un poco de agua para para sobrevivir". "Y eso es algo importante de la serie, que nos muestra esa parte humana a la que se enfrentan en Latinoamérica las personas que por una u otra razón terminan metidos en el narcotráfico", reflexiona.
"Angelito es una mezcla de de muchas cosas de mi entorno, también de mi adolescencia, de gente que conocí. Vivía en una ciudad que tiene este flagelo del narcotráfico y creo que Angelito está construido a partir de de estos personajes que conocí en mi infancia y en mi adolescencia", reflexiona el colombiano. Por su parte, Leandro Firmino también se trajo su experiencia personal para encarnar al mecánico del narcosubmarino.
Sobre el proceso de meterse en la vida de un personaje real también reflexionaba González en la entrevista con SensaCine. El suyo está basado en Agustín González, un gallego que, como Nando, también fue campeón de España de boxeo y que actualmente cumple condena por lo que hizo. "Al principio busqué mucha información sobre Agustín y descubrí que había poquísima y muy pocas imágenes.
Y vi un vídeo del juicio en el que habían puesto su cara borrosa. Coqueteaba con la idea de poder ir a conocerlo a la cárcel, si él hubiera querido por supuesto. Pero luego, hablándolo con Daniel Calparsoro vimos que podía ser más interesante la idea de no estar tan basado en hechos reales, sino inspirado y que eso nos podría dar la oportunidad de tener más libertad creativa, narrativa".
Aún así, el actor madrileño comparte una anécdota de la que él mismo se sigue sorprendiendo hoy: "Cuando llevaba un mes y medio grabando, estaba con un especialista que es de Vigo y me dijo: 'Alex, es impresionante lo que te pareces. Es que yo lo conocía'. Y yo pensaba: '¿Pero cómo nos vamos a parecer si yo no sé ni cómo habla?'. [...] Sin entrar en temas místicos, me pareció curioso cómo a veces la información viaja y creo que, como actores, a veces invocas algo. En este caso yo, sin saberlo, estaba trayendo una energía que no era mía y que a mí mismo me sorprendía a veces. Así como con otros personajes piensas 'voy a caminar así', con Nando me salía de una forma involuntaria. Sin yo saberlo, creo que tengo mucho del personaje real".
Asimismo el intérprete muestra un profundo amor, admiración y respeto por Galicia en cada una de sus declaraciones y no duda en asegurar que cree que eso le ayudó a incorporar el acento, que cuenta con la aprobación de sus compañeros gallegos. "Galicia es un lugar con el que estoy conectado. Es un amor vertical y cuando digo vertical es porque ese es el amor que creo que tenéis los gallegos por por la tierra. Y que uno no comprende el significado de la palabra morriña hasta que está allí, hasta que lo vive no de vacaciones, sino viviendo allí".
"Por una parte me daba mucho respeto-miedo dar el salto a soltarme para hablar con el acento, pero, por otra parte, tenía mucha información", explica sobre el proceso. "Al final, un acentoestá hecho de la cultura, de la gastronomía, del clima, de comprender que en Galicia llueve siete meses al año. Y si no comprendes eso, es difícil hacer el acento. Creo que al final lo pude incorporar de manera orgánica. Y bueno, yo es que me hacía hasta afirmaciones por la mañana: 'Yo soy gallego. Yo soy de Vigo'. Y al final pues me sentí muy cómodo haciéndolo y me ayudó a poder contar la historia de Nando con una herramienta más".
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